Es muy curioso que en la adversidad, cuando el mundo se ríe de ti, cuando yaces derrumbado y apenas puedes moverte es donde desatas aquella fuerza de voluntad majestuosa, aquel potencial digno de la persona que realmente eres. Asoma la cabeza hacia la superficie, las aguas profundas no pueden contra ti. Toma una última bocanada de aire fresco y lucha por sobrevivir.
«Tres centavos marcados»: Mary Elizabeth Counselman; relato y análisis.
-
*«Tres centavos marcados»: Mary Elizabeth Counselman; relato y análisis.*
«Todos coincidieron en que todo el asunto era la concepción de un cerebro
re...
Hace 1 día
No hay comentarios:
Publicar un comentario